Árbol originario de América: Argentina, Paraguay, Brasil, Bolivia y Perú. Su hábitat fundamental son las zonas tropicales y subtropicales de los bosques húmedos semicaducifolios.
Este árbol es de 6-12 m de altura, pero no es raro que alcance los 25 m de altura. Presenta un tronco en forma de botella, que llega hasta 2 m de circunferencia, donde almacena el agua en tiempos de sequía. Tanto el tronco como sus ramas, están protegidos por gruesas espinas cónicas. En los árboles jóvenes, el tronco es de color verde por su alto contenido en clorofila, lo que le permite realizar la fotosíntesis cuando le faltan las hojas. Con la eded se forman vetas rugosas y agrietadas de color marrón-grisáceo. Sus hojas son caducifolias y están divididas entre 5-7 folíolos largos.
Sus flores son de un blanco crema en el centro y se transforman en color rosa hacia las puntas de sus 5 pétalos. Tienen unos 10-15 cm de diámetro y su forma es similar al hibiscus. Las flores aparecen todo el año en latitudes bajas, y de enero a junio en los especímenes cultivados en latitudes superiores a 30°. El fruto es una vaina lignosa con forma ovoide de 20 cm de largo. Las semillas son parecidas a garbanzos negros y están rodeados por una masa de fibra algodonosa y floja.
Si necesitáis ayuda al identificar vuestro árbol; podéis probar con nuestra guía de identificación de Bonsáis.
Cuidados específicos del Bonsái de Palo Borracho
Situación: Dado su origen tropical/subtropical, es un árbol que debe protegerse de las heladas y de las bajas temperaturas. Debe estar en el exterior a pleno sol todo el año. Así mantiene su color verde, y el crecimiento de tallos y hojas será de un tamaño más adecuado a su cultivo como Bonsái. En invierno debe colocarse en el interior en alguna habitación sin calefacción o en un invernadero cálido, con mucha luz. Esporádicamente resistiría alguna pequeña y poco intensa helada (-1ºC), pero esto lo haría a costa de perder todas sus hojas.
Riego: Debe regarse a fondo y abundantemente, hasta que salga el agua por los agujeros de drenaje, cuando la superficie del substrato comience a secarse. Sin embargo, no conviene encharcar el suelo ni mantenerlo en contacto permanente con agua. Es un árbol resistente a la sequía y se puede dejar secar el substrato entre riegos. Esto facilita la aparición del abultamiento característico del tronco que le da la forma de botella. Esto ocurrirá solamente cuando se ha cultivado a partir de semilla, no suele funcionar con esquejes. Esto ocurre porque en la naturaleza cuanto más lejos está del agua, más desarrolla su tronco. Debe tenerse cuidado porque esta técnica puede causar la pérdida de las hojas, pues este es el comportamiento normal en la estación seca.
Abonado: Abonar frecuentemente usando abono orgánico de calidad, sobre todo durante la temporada de crecimiento vigoroso (primavera) y otoño. Disminuir el abonado en las épocas en las que detiene su crecimiento (invierno y épocas de máximo calor).
Poda y Alambrado: A causa de su vigor, se puede podar en cualquier momento del año, aunque es aconsejable realizar una poda intensa en invierno para lograr nuevos brotes en primavera. La ramificación es complicada, y debe insistirse con los pinzados sistemáticos. Una técnica que facilita la ramificación consiste en cortar la yema apical y defoliar todas las hojas, una vez alcanzada la longitud requerida. El alambrado y colocación de las ramas se realiza entre la primavera y el verano. Cuide que el alambre no muerda la corteza, pues esta es muy frágil y es muy fácil dañar las ramas blandas y fibrosas que, además, engordan rápidamente. Como tienden fuertemente a crecer rectas y hacia arriba, una técnica menos agresiva para abrir las ramas y modelar la copa es usar pesas o tensores durante el modelado.
Trasplante: Cada 2 o 3 años antes de la primavera. Es recomendable proteger al árbol después del trasplante durante un par de meses, colocándolo en un lugar bien iluminado y evitando la exposición directa al sol. El árbol es poco exigente con el substrato, pero una buena mezcla sería un 33% de arena gruesa o material equivalente (tierra volcánica, etc.) y 66% de mantillo u otro material que retenga el agua. Pode la tercera parte de las raíces durante el trasplante, pero sin cortar demasiadas raíces finas.
Propagación: Es muy fácil de reproducir a través semilla, sólo hay que sembrar directamente en el substrato y sin tratamiento previo. Sin embargo, si se desea asegurar la germinación y además acelerar el proceso, es posible romper la latencia sumergiendo las semillas en agua fría unas 24-48 horas antes de plantarlas. Otra opción aceptable es lijar un poco la cáscara de las semillas. El poder germinativo de las semillas se mantiene durante más de 5 meses. También es posible la propagación usando esquejes lignificados. Con esta técnica, sin embargo, es más difícil lograr el abultamiento característico del tronco.
Pestes y Enfermedades: Este árbol es bastante resistente a las enfermedades, no obstante, puede verse afectado por la cochinilla, el pulgón y la araña roja. Estas plagas lo atacan fundamentalmente cuando se encuentra en zonas mal ventiladas o de interior, o en un ambiente seco y caluroso. Esto provocará un debilitamiento progresivo del árbol.
Para una información más detallada en estas técnicas; podéis buscar nuestra sección del Cuidado del Bonsái.
Ejemplos de Ceiba Speciosa Bonsai (Palo Borracho)
Ceiba Speciosa Bonsai (Palo Borracho)
